El altar mayor está ubicado en el presbiterio, un área delimitada por un alto podio perimetral que, según la configuración de las aberturas, albergaba los asientos de madera del coro.

En el frente sur del presbiterio hay una entrada bloqueada por el flujo de lava, que aún hoy presenta las piedras colocadas por los habitantes de Misterbianco en 1669, en un intento desesperado de impedir que la lava entrara en la iglesia.

En continuidad con los escalones pertenecientes a esta entrada, hay unos escalones muy deteriorados que conducían al púlpito, presumiblemente de madera.